Vivir del recuerdo

Esto es algo que escribí hace tiempo en mi space del messenger. A la gente le gustó, y por eso me apetece colgarlo aquí: porque a mí también me gusta como quedó y aquí se conservará mejor que en el espacio, y porque supongo que es probable que en el blog lo lea más gente. Saludos.

No podemos vivir de lo que ocurrió en el pasado. Tenemos que disfrutar del día a día, y aprovechar bien el tiempo porque la vida es corta. Vivir del recuerdo es una lástima, pero a veces es difícil evitar esta situación.

Si en el pasado fuiste más feliz que ahora, no debes lamentarte por tu mala suerte o porque te equivocaste. En lugar de eso, tienes que intentar recordar esos momentos de forma agradable. Ya vendrán otros tiempos en los que serás más feliz que ahora. Pero si pierdes tu tiempo actual para dedicarte a pensar en lo que pasó, no consigues nada. Bueno, recordarlo de vez en cuando no es nada malo, pero nunca debemos llegar al punto de pasarnos el día lamentándonos por nuestra vida y sin ánimos para salir adelante porque en comparación con el pasado ahora no tenemos nada. Nunca hay que perder la esperanza.

Si por el contrario, en el pasado viviste más problemas que ahora, y esos problemas no te dejan vivir, debes aprender a olvidar lo ocurrido. Si te equivocaste tú, piensa que ahora ya no puedes volver atrás, pero sí que puedes hacer un esfuerzo para salir adelante y no volver a fallar en lo mismo. Si te fallaron los demás, llega un momento en que tienes que aprender a perdonar, por muy mal que se portaran contigo. No puedes permitir que algo demasiado negativo te marque de por vida (aunque a veces es inevitable), y qué mejor manera que reconciliarte con la gente para volver a empezar...

Si los problemas del pasado fueron simplemente cosas que suceden y que no se pueden evitar,tienes que salir adelante. La vida es así, hay momentos buenos y malos. Recuerda lo que pasó, pero no dejes que acabe con tu vida, tú tienes que seguir como siempre.

Infierno

Hoy no sé qué es lo que siento. Bueno, miento, sí que lo sé. Lo que no sé es la manera de expresarlo con palabras, pero lo voy a intentar: siento pena, rabia, insatisfacción conmigo y con mi vida, aburrimiento, falta de motivaciones, indiferencia... Y ahora viene la palabra clave: SOLEDAD.

Estoy muy sola. No tengo amigos, no tengo colegas, no tengo novio. Me paso los días encerrada en casa sin nada que hacer. Estoy en el ordenador, leo, escucho música, hago ejercicio... En fin, NADA de lo que me apetece hacer realmente. Dentro de mí hay unas ansias tremendas de salir a la calle a divertirme, pero sé que eso no es posible porque simplemente no tengo con quien salir. Y que nadie me venga con lo típico de que salga por ahí y ya conoceré gente. No es tan fácil, y menos para una persona tímida que vive en un pueblo pequeño donde todos sabemos todo de los demás, por lo que todo el mundo tiene la misma imagen de mí. La imagen de empollona tonta y marginada.

Hasta se me quitan las ganas de hacer la estada en empresa que empiezo dentro de 12 días. Con la ilusión que me hacía antes, y ahora... En fin. Supongo que en este estado de soledad y aburrimiento es normal perder el interés por las pocas cosas que te interesaban antes. Viviendo como vivo yo ahora sólo se consigue tristeza, mucha tristeza. La soledad es un infierno, y yo no tengo muy claro que algún día pueda salir de él...